El día en que medio millón de personas se reunieron por una sola voz

¿Te imaginas cómo se siente ser el centro de atención de medio millón de personas? Eso fue lo que vivió Rigo Tovar el 21 de octubre de 1981, cuando ofreció un concierto gratuito en el lecho del río Santa Catarina, en Monterrey, Nuevo León.  Aunque las cifras oficiales hablan de alrededor de 50,000 asistentes, muchos coinciden en que la multitud superó ampliamente esa cifra, llegando a estimarse en más de 400,000 personas, e incluso algunos afirman que fueron hasta 500,000.

En una época sin redes sociales ni transmisiones en vivo, Rigo logró convocar a una multitud que desbordó las expectativas.  El evento fue organizado por la estación de radio XEBJB y el Gobierno del Estado, y se convirtió en un hito en la historia de la música mexicana.  La entrada de Rigo al escenario fue tan espectacular como su música: llegó en helicóptero debido al caos vehicular que se generó por la gran cantidad de asistentes.

Durante aproximadamente una hora y media, Rigo Tovar y su banda Costa Azul, acompañados de mariachi y trío, hicieron bailar a todos con sus éxitos como “Mi Matamoros querido” y “Lamento de amor”.  El ambiente era de fiesta total, con familias enteras disfrutando del espectáculo desde sus vehículos estacionados en las avenidas cercanas. 

Este concierto no solo consolidó a Rigo Tovar como el “ícono de las multitudes”, sino que también marcó un antes y un después en la historia de los conciertos masivos en México.  A pesar de que han pasado más de cuatro décadas, su récord de asistencia sigue siendo insuperable, superando incluso a artistas internacionales como Queen y al Papa Juan Pablo II, quienes también se presentaron en el mismo lugar en años anteriores. 

Rigo Tovar, el hombre que hizo del baile una fiesta nacional, sigue siendo recordado con cariño y admiración.  Su legado perdura en cada acorde de cumbia y en cada recuerdo de esa noche mágica en Monterrey.  Porque Rigo, sin duda, es amor.

Escrito por: Rulo Ham el 29-06-2025